Sensible fallecimiento del biólogo Luis Alfonso Vidal Velásquez
El profesor Vidal, como muchos lo llamaban, fue una mente brillante de la biología marina, dedicó su vida a la investigación y la academia.
A los 70 años de edad falleció el biólogo marino, investigador y docente Luis Alfonso Vidal Velásquez, dejando un profundo pesar en sus familiares y amigos, por su repentina partida a la casa del Señor.
Fue un gran ejemplo de honestidad, bondad y una gran sensibilidad hacia los animales hasta sus últimos días. Fiel creyente en Dios y católico. Admirado por sus colegas debido a su pasión por su carrera y lo mucho que llegó aportar a la ciencia; aun así, siempre mantuvo la humildad y fue una persona de puertas abiertas a todo aquel que quería aprender.
Luis Alfonso Vidal Velásquez era vallecaucano, nació el 13 de enero de 1950, fruto del matrimonio del teniente coronel Luis Alfonso Vidal Neira y doña Margarita Velásquez Martínez; de esa unión matrimonial también nacieron sus hermanos: María Eugenia, Soledad, Manuel Eduardo, Marcelino y Alejandro.
Formó un hogar al lado de Ligia Hernández Gómez, de cuya unión nacieron sus hijos Anayansi y Josué Vidal Hernández.
Un gran académico
El profesor Vidal, como muchos lo llamaban, dedicó su vida a la investigación y la academia, se desempeñó como profesor en diferentes universidades: en el Programa de Biología Marina de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, en el Programa de Biología de la Universidad del Atlántico, en la maestría en Ciencias de la Universidad Nacional de Colombia y en los programas de maestría y pregrado de la Universidad del Magdalena.
Conocedor del fitoplancton marino, estuarino y dulceacuícola que incursionó en este campo de la ciencia estudiando “Las diatomeas y los dinoflagelados de la Bahía de Cartagena”, investigación con la que en 1974 obtuvo su grado de Biólogo Marino. Continúo su formación en el área de la ficología con su Maestría en Ciencias de la Universidad Nacional de Colombia donde estudió el fitoplancton estuarino en la Ciénaga Grande de Santa Marta. Durante sus estudios participó de las investigaciones de grado de sus colegas ayudándoles en sus faenas y en los análisis de las muestras de forma desinteresada.
Trabajó también en el Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras ‘José Benito Vives De Andréis’ – Invemar como investigador en el programa de recuperación y monitoreo del fitoplancton de la Ciénaga Grande de Santa Marta y en el Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas – CIOH, también como investigador, donde participó en el Programa para el Estudio Regional del Fenómeno El Niño en el Pacífico Sudeste (ERFEN) estudiando el fitoplancton del Ros.
Fruto de sus investigaciones escribió el “Manual del fitoplancton de la Ciénaga Grande de Santa Marta y cuerpos de agua aledaños” y el capítulo del libro “La comunidad fitoplanctónica en el Mar Caribe colombiano” entre otras publicaciones.
En estos momentos de dolor y tristeza, el periódico EL INFORMADOR, su equipo de colaboradores, periodistas y su Junta Directiva, lamentan su sensible fallecimiento y expresan sus más sentidas condolencias a su esposa Ligia Hernández Gómez; a sus hijos Anayansi y Josué Vidal Hernández y señora; a sus hermanos y demás familiares. Paz en su tumba.
In Memoriam
LUIS ALFONSO VIDAL VELASQUEZ (1950 – 2020)
El 8 de noviembre de 2020, tristemente partió el profesor Luis Alfonso Vidal Velásquez, la primera autoridad del fitoplancton marino en Colombia. Alfonso se graduó como Biólogo Marino de la Universidad Jorge Tadeo Lozano y desde entonces dedicó su vida al conocimiento de las especies del fitoplancton marino. Adelantó estudios de maestría en la Universidad Nacional de Colombia. Su tesis de maestría fue meritoria y se convirtió en un libro guía del fitoplancton estuarino en muchas universidades del país.
Luis Alfonso impartió clases en diversas universidades de Colombia, participó en numerosos cursos sobre taxonomía del fitoplancton, colaboró con actividades del Grupo ANCA-IOCARIBE y fue mentor de muchos biólogos. Su carisma, disciplina y habilidad para manipular microalgas bajo el microscopio y su profunda agudeza para inferir información biológica, lo convirtieron en un referente permanente. Hizo sus propios capilares para poder manipular y desplazar microalgas, de pocos micrones de largo, bajo el microscopio. Sus cualidades humanas y su sensibilidad a los problemas sociales lo hicieron muy apreciado por sus alumnos y colegas.
Alfonso era un espíritu libre, nunca aceptó un puesto permanente porque quería ser independiente, incluso a costa de su estabilidad financiera. Era un verdadero caballero, su amabilidad fue su firma, y todas las personas que tuvieron la oportunidad y la suerte de conocerlo, lo recuerdan como su rasgo más característico.
Insensible al atractivo de la vida material, su universo estaba en una gota de agua de mar, donde podía sumergirse y admirar la verdadera belleza de este mundo: las infinitas formas de la vida microscópica, su elegancia y variedad. Tanto dentro como fuera del laboratorio, Alfonso mantuvo vivo su espíritu de niño, y este es el más notable de su legado: nunca pierdas el asombro cuando miras la naturaleza, porque en cada ser hay una belleza oculta; y esto era cierto cuando se trataba de personas, siempre veía lo mejor en cada uno y lo celebraba.
La muerte de Luis Alfonso deja un enorme vacío y entristece a toda la comunidad científica colombiana, especialmente en las ciencias marinas. Afortunadamente, Luis Alfonso deja una huella imborrable; su paz se conservará en el corazón de las personas que lo conocieron. Su labor científica es una marca de piedra en el país, y lo seguirá siendo durante mucho tiempo.
Nuestro más sentido pésame a su esposa Ligia, su hija Anayancy y su hijo Josué.
Sus amigos Brigitte y Ernesto
Bogotá, Noviembre 9/2020