INVEMAR. (2023). Monitoreo de las condiciones ambientales y los cambios estructurales y funcionales de las comunidades vegetales y de los recursos pesqueros durante la rehabilitación de la Ciénaga Grande de Santa Marta. (Informe Técnico Final 2023 22; p. 197). INVEMAR.

https://portal.invemar.org.co/documents/10182/303308/ITF_CGSM_Web.pdf/5531a4ea-f8ec-4914-8f2f-b35ffec0de7c

La ecorregión de la Ciénaga Grande de Santa Marta – CGSM es el complejo lagunar estuarino más extenso de Colombia del que hacen parte 14 municipios. Por sus características hidrológicas, ecológicas y geomorfológicas, sus ecosistemas estuarinos son considerados de los más productivos de la zona tropical, hecho que le ha permitido estar distinguida con cinco figuras de protección. A pesar de su gran importancia, la CGSM mostró un grave deterioro ambiental en la década de los noventa como producto del desequilibrio hídrico originado por la construcción de la carretera Ciénaga-Barranquilla en los 50s, que condujo progresivamente a la hipersalinización del sistema. Con el objeto de promover su rehabilitación, se realizó la reapertura de cinco canales naturales preexistentes, con conexión al río Magdalena. Desde la apertura de los canales y para evaluar los cambios ambientales, estructurales y funcionales de las comunidades vegetales (manglar), de la calidad del agua y los recursos pesqueros, el Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras INVEMAR con el apoyo de la Corporación Autónoma Regional del Magdalena –CORPAMAG y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible- MinAmbiente, ha venido realizando el presente monitoreo ambiental en la CGSM. Adicionalmente, CORPAMAG, desde 2006, ha venido realizando una serie de intervenciones en la ecorregión, para mejorar los flujos hídricos. Acciones que han generado cambios ambientales que se han evidenciado en el monitoreo.

El agua del sistema lagunar CGSM entre octubre de 2022 y septiembre de 2023 fue predominantemente salobre y dulce, lo que refleja que para dicho período de monitoreo continuó ingresando agua dulce al sistema, pese a que los meses fueron contrastantes con respecto a la fluctuación mensual de las precipitaciones. La temperatura del agua fue mayor en meses donde aumentaron las precipitaciones. En el 72 % de las estaciones, las concentraciones de OD superaron el valor mínimo para conservación de flora y fauna (4,00 mg O2/L); y en el caso de las estaciones ubicadas en las zonas 0, 2, 3, y 6, clasificadas como estuarinas o marinas, el 22 % de los registros superaron el pH de 8,5, indicando una alta productividad primaria, situación que se dio especialmente en el cuerpo de agua principal y el Complejo de Pajarales, que en períodos con bajos niveles de agua dulce tienen tendencia a presentar condiciones desfavorables para la flora y fauna. La transparencia del agua fue baja con respecto a la profundidad en la mayor parte del complejo lagunar, lo cual estuvo directamente relacionado con las altas concentraciones de sólidos suspendidos totales (SST), especialmente en estaciones por donde ingresa agua dulce al complejo lagunar (SST > 200 mg/L). Las concentraciones de clorofila a aumentaron entre mayo y septiembre de 2023 en la zona marina, en el cuerpo de agua principal y en el Complejo de Pajarales, generando condiciones eutróficas e hipertróficas en el sistema, asociadas a la abundancia de vegetación flotante en la zona y a condiciones climáticas predominantemente lluviosas. Se identificaron niveles altos de ortofosfatos en el río Sevilla y su desembocadura, mientras que en el caso de los nitritos las concentraciones más altas se midieron en la Ciénaga El Torno y la Ciénaga El Loro, superando rangos típicos en ecosistemas estuarinos. La presencia de metales como cadmio, cobre, cromo, mercurio y zinc, continuó siendo persistente en sedimentos, especialmente en estaciones por donde ingresa agua dulce al complejo lagunar, lo cual reitera la necesidad de continuar su monitoreo.

En cuanto a la calidad sanitaria del agua, las concentraciones más altas de Coliformes Totales y Termotolerantes predominaron en Boca Caño Aguas Negras, Ciénaga La Luna, Isla del Rosario, Nueva Venecia y Buenavista, estaciones que se encuentran cercanas a las poblaciones costeras y palafíticas o reciben aportes directos del río Magdalena. Con respecto a los microorganismos potencialmente patógenos, la especie Vibrio cholerae predominó en todas las estaciones y Aeromonas hydrophila fue la única especie aislada del género Aeromonas.

Con el objetivo de determinar la presencia y dinámica espacio temporal de las microalgas potencialmente nocivas, se realizaron muestreos mensuales en dos (2) estaciones, y un muestreo semestral en siete (7) estaciones en la época de lluvias de 2022 y seca de 2023. Los resultados evidenciaron que los cambios de la composición y densidad fitoplanctónica estuvo regulada por baja salinidad del agua en ambas épocas climáticas, lo cual favoreció la presencia y predominio de las cianobacterias, coincidiendo con lo registrado históricamente para la CGSM. El monitoreo del bosque de manglar se realizó en seis estaciones permanentes, cinco de ellas ubicadas en el Complejo de Pajarales (costado noroccidental) y una en el sector de Sevillano (costado nororiental). A nivel general se encontró una estabilidad y ganancia en la mayoría de los atributos de estructura del bosque en las estaciones de monitoreo. En el sector de Aguas Negras quedo en evidencia que el bosque tiene una fuerte afectación, con una pérdida del 33% del arbolado en esta estación. Allí, la permanente inundación y flujo de agua no permite el establecimiento de plántulas y propágulos. En consecuencia, el indicador de integridad biológica de manglares en este sitio disminuyo. A pesar de que en el 2023 se registraron anomalías positivas asociadas al fenómeno del Niño, la salinidad intersticial no aumento considerablemente en las estaciones de monitoreo. Aun así, la mayor parte de ellas mantienen una categoría “regular”, excepto la estación de referencia Rinconada que mantiene su característica de “buen estado”.

En el período entre enero y septiembre de 2023, se gestionaron 26.299 registros a través del Sistema de información pesquera de Invemar – SIPEIN (21.869 de captura y esfuerzo, 2.914 de tallas y 1.516 de precios), mediante los cuales se estimó una producción pesquera desembarcada de 5.485 t. Este desembarco estuvo compuesto en un 78% por peces y 22% de crustáceos. En el grupo de peces incidieron mayoritariamente la mojarra rayada (28,5%), la mojarra lora (22,5%) y un grupo compuesto por la lisa, macabí, chivo mapalé, chivo cabezón y mojarra peña, que constituyeron el 29,8% del total de peces desembarcados. Referente a los crustáceos, las jaibas representaron el 75,1% del total del grupo. Con la continuidad de salinidades bajas de las aguas del complejo lagunar, se mantiene la mayor representación de especies estuarinas (mojarra rayada) y dulceacuícolas (mojarra lora). Se deduce con lo evaluado a septiembre, un moderado incremento de la producción pesquera con respecto a 2020-2022, figurando aún por encima de los estimados anuales para el periodo 2008-2019. En cuanto a los aspectos económicos, se estimaron ingresos promedios mensuales para el 2023 de $ 2.357 (±268) millones COP. También se actualizaron las tallas de madurez sexual (TM) para las especies: chivo cabezón (30,1 cm de longitud total-Lt), mapalé (16,3 cm Lt), mojarra rayada (21,6 cm Lt), mojarra lora (19,1 cm Lt), coroncoro (21,7 cm Lt), lisa (25,0 cm Lt) y de manera preliminar para el moncholo (26,6 cm Lt), en el caso del cuatro ojo y robalo, la poca información no permitió la estimación de este parámetro, razón por la cual el muestreo continuará hasta obtener un número significativo de muestra. En el caso de los crustáceos se estimó la TM para la jaiba azul en 95 mm de ancho del caparazón (Aca) y para la jaiba roja en 86,7 mm de Aca. En el caso de macabí y lebranche, se evidenció que, en la CGSM, solo se pescan en estado juvenil, dada su migración reproductiva. Por otro lado, el indicador de presión pesquera ejercida por los diferentes artes de pesca en 2023, se estimó en 53,3%; resultado que indica una incidencia negativa de los artes de pesca sobre la estructura de tallas de las principales especies de peces, lo cual confirma a este importante ecosistema estuarino como área de criadero. Toda la información generada se constituye en insumo para la generación de medidas de manejo en el marco del Comité Ejecutivo de la Pesca. Así mismo, los resultados apoyan el Informe del Estado de los Ambientes y Recursos Marinos y Costeros en Colombia, la generación de conceptos técnicos y acompañamiento a actores afines a la problemática actual de la ecorregión. Todos los resultados han sido socializados a la comunidad de pescadores y entidades relacionadas con la administración de los recursos de la CGSM.