Moscarella, J., & Cotes, G. (2000). Agenda común para la Reserva de la Biosfera de la Ciénaga Grande de Santa Marta. Borrador Folleto, 30 p.

DCA

PRESENTACION Esta publicación está dedicada a los niños de la Ciénaga Grande de Santa Marta: ellos son una reserva de esperanza para el mundo En .1987 arrancó en firme la ejecución del Proyecto de Cooperación ColomboAlemán para la Rehabilitación de la Ciénaga Grande de Santa Marta, que se hizo conocido en la comunidad por la sigla PROCIENAGA. Las etapas de este proceso se consignan en la presente publicación con el fin de que sirvan de memoria para el reto más grande que afronta ahora la ecorregión: capitalizar lo avanzado y demostrar a la comunidad internacional que estamos dispuestos a cumplir con la misión de manejar en forma adecuada este sitio RAIVISAR, designado así mediante decreto 224 de 1998 y hoy naciente Reserva de la Biosfera. Esta declaratoria fue otorgada por la UNESCO en noviembre del año 2000, teniendo en cuenta los valores naturales y culturales de la ecorregión y gracias al esfuerzo de las comunidades y entidades de la región y al aval otorgado por el Ministerio del Medio Ambiente. Durante este primer período de PROCIENAGA se han derivado varias lecciones que entre otras cosas han permitido obtener mayor claridad sobre los fines del proceso de recuperación de la ecorregión. Hoy sabemos que la suerte de la Reserva de la Biosfera está ligada de manera consustancial a la cultura de las personas cuyas vidas transcurren allí. Dicha cultura tiene, como la naturaleza, una compleja variedad que cada día aprendemos a comprender mejor. Aunque el conocimiento sobre el territorio .y la cultura ha aumentado debe seguir profundizándose junto con estrategias de divulgación del mismo para que el proyecto de vida de la Reserva se haga pan de todos los días. Las instituciones y la comunidad en general han ganado confianza en sus relaciones, aunque la debilidad- de las primeras y la falta de organización duradera de la segunda, hace prever—Q-~ —q eiIiere un trabajo más profundo en ambas direcciones. Especialmente la organización y modernización de los municipios es uno de los retos más importantes de esta década. El aumento de los conflictos en la ecorregión será una de las materias más delicadas a resolver en la Reserva. En el territorio se podrá avanzar en la solución de los conflictos relacionados con el manejo de los recursos naturales y en la implementación de mecanismos que conduzcan a consolidar una nueva ética de convivencia y manejo de los asuntos públicos. La necesidad de redefinir la adaptación de la sociedad al entorno biogeográfico es el reto mayor que a todos nos espera. Hay que seguir trabajando en la búsqueda de bienestar para las personas junto con unas metas de conservación sobre las cuales está muy pendiente la comunidad internacional. La generación de riqueza es inaplazable para lo cual hay que ser muy imaginativos en la búsqueda de alternativas cero emisiones. El tránsito de una cultura extractiva a otra adaptativa es un desafío inaplazable. La Reserva de la Biosfera de la Ciénaga Grande de Santa Marta requiere un mecanismo de planificación y gestión que nos conducirá a examinar las limitaciones de las competencias y funciones de las entidades públicas, a asomarnos a las posibilidades que brindan otras formas flexibles que brindan las organizaciones privadas y comunitarias y, a sopesar otras propuestas que se prevén en la Constitución, en el proyecto de ley de ordenamiento territorial y en normas ambientales. A lo ya aprendido y a lo que sigue de aprendizaje contribuirá sin ninguna duda la AGENDA COMÚN PARA LA RESERVA DE LA BIOSFERA DE LA CIÉNAGA GRANDE DE SANTA MARTA que presentamos en esta publicación con el ánimo que sea conocida, discutida, mejorada, y sobre todo, incorporada en el cotidiano ejercicio de las responsabilidades de las entidades públicas y privadas y de las organizaciones comunitarias. Con estos esfuerzos locales y con el apoyo decidido de la nación y la comunidad internacional ocuparemos un lugar destacado en la Red de reservas del hombre y la biosfera y nos convertiremos en un punto clave para la vida en el planeta.